Las pocas ventas y la ausencia de actualizaciones en el Mac Pro actual, junto con las demandas de los usuarios más profesionales han dejado algo muy claro: puede que ya no sea tanta gente como antes pero la demanda para un Mac Pro modular es incontestable. Apple ya lo reconoció en su día, y estamos esperando a que la compañía lo presente para resarcirse con todo el sector "Pro".
Ese sector "Pro" sueña con volver a algo que pueda ser flexible y fácil de actualizar como lo fueron los Mac Pro originales: una torre como la de los PC tradicionales. ¿Fueron esos los primeros ordenadores modulares de Apple? Desde luego que no: la compañía ya hizo experimentos con un Mac modular en plenos años 80.
El ordenador que simulaba una estantería
No, no estoy hablando de los Power Mac G3 o G4 con ese diseño que no dejaba indiferente a nadie. Mucho antes de la llegada de esos ordenadores Apple tuvo encima de la mesa a Jonathan:
En Stories of Apple tienen la historia y las imágenes de este ordenador que jamás llegó a ver la luz. El concepto 'Jonathan' tenía la idea de aumentar las ventas de los Mac de sobremesa en una época en la que macOS tenía un 15% de cuota de mercado y en la que los PC con Windows estaban dominándolo todo.
La parte central y básica del Jonathan ejecutaría el sistema operativo, y los clientes podrían ampliarlo con módulos para utilizar unidades de almacenamiento externas y ejecutar software de otros sistemas como UNIX o DOS (recordad: estamos en 1984). Esta compatibilidad extra ayudaría a que el sistema operativo de los Mac de entonces se extendiera más y compitiera en condiciones con Windows. Otros módulos, además, podrían añadir opciones de conectividad para trabajar en una red local.
En una época en la que los ordenadores eran el único dispositivo de informática personal que podías tener, el Jonathan podría ser usado tanto por usuarios básicos que necesitaban sólo la unidad central del ordenador como los profesionales que lo comprarían junto con varias de sus expansiones. Como podéis ver en las imágenes, el diseño del ordenador simulaba una estantería "en la que podías colocar varios libros".
El primer prototipo del Jonathan fue mostrado al consejo administrativo de Apple en junio de 1985, quien tuvo demasiadas críticas negativas para el ordenador. Era demasiado costoso (había muy poco margen de beneficios con él, aproximadamente un tercio del del Macintosh II), y se tildó de "demasiado avanzado y arriesgado".
Ofrecer la compatibilidad con el software presente en DOS iba a ser "un caballo de Troya inverso": en vez de motivar a los consumidores a adoptar el sistema operativo de Mac, el Jonathan provocaría que los desarrolladores se fuesen en masa a DOS para asegurar la compatibilidad de sus programas en todas partes. Habría sido el fin del Mac OS de la época, del mismo modo con el que ya pasó algo muy parecido con OS/2.
Finalmente el proyecto Jonathan se descartó, aunque no fue un esfuerzo en vano. Parte de sus componentes y de su diseño se utilizaron en otros Macs que saldrían años después, como los Performa o los Mac IIx y IIfx. Seguro que más de un veterano que trabajó en Apple en esa época se estará acordando del Jonathan ahora que hay tanto clamor para volver a lo modular.