Las IA generativas están avanzando a pasos agigantados con ChatGPT a la cabeza, pero también están saliendo a la luz algunos nombres que hasta hace poco eran desconocidos para muchos, pero que a día de hoy nos resultan familiares. Uno de los ejemplos más claros es el de Sam Altman, fundador de OpenAI e ideólogo, en parte, de lo que conocemos ahora de ChatGPT. En este artículo profundizamos un poco más sobre su persona, que está muy ligada al mundo Apple.
Los inicios de Sam Altman
Samuel H. Altman en su infancia aprendió a programar y eran tan curioso que tuvo la “brillante” idea de desarmar uno de los primeros ordenadores que lanzó Apple como es el Macintosh con apenas 8 años. Y así se introdujo en el mundo de la tecnología, comenzando con un Mac. Todo esto lo relataba el propio Sam en una entrevista al The New Yorker donde también afirmó que usar un ordenador le ayudó con la sexualidad y a relacionarse con otros grupos similares a él.
Tras esta época, pudo acceder a la Universidad de Standford para estudiar informática, pero al igual que otras personas de renombre no la acabó (aunque no significa que esto se deba seguir al pie de la letra). Esta decisión la tomó para poder dedicarse al completo a su primera idea, Looopt, que se basaba en una app para compartir la ubicación. La verdad es que una historia similar a la de Steve Jobs a la hora de montar su primera empresa.
Obviamente esto a día de hoy lo vemos realmente común y no es una idea brillante, pero estamos hablamos del año 2005 donde WhatsApp no existía. Pero esta idea no terminó funcionando, aunque fue el comienzo de Altman como empresario abriéndole la puerta a numerosas empresas del sector, destacando la de Y Combinator que invirtió en Dropbox.
Más allá de esto, la venta de uno de sus proyectos por cuarenta millones de dólares también le dio la oportunidad de comenzar a realizar inversiones y acabar uniéndose con Elon Musk para crear OpenAI. Una compañía que se centró en la inteligencia artificial, pero que en sus comienzos no creemos que pensara llegar hasta donde está ahora.
El presente de Sam Altman
Y esta historia deriva en la actualidad, donde Sam Altman tras unirse con Elon Musk consiguieron enfrascarse en la misión de crear una inteligencia artificial de consumo. Y a las pruebas debemos remitirnos para ver claramente que se ha conseguido con nota. Los ejemplos que tenemos sobre la mesa son ChatGPT y DALL-E.
Y la verdad es que lo han conseguido, aunque Elon Musk ya no se encuentra dentro de la compañía. ChatGPT ha tenido un gran éxito desde que se lanzara a finales del año pasado, aunque no ha estado exento de críticas.
El propio CEO de OpenAI reconoce que la mejor estrategia para integrar un producto es de una manera gradual. De esta manera, se consigue contar con una buena adaptación sin ver lo que tiene detrás. Y es que ya el propio Sam Altman reconoció que ChatGPT está a día de hoy realmente limitado y que cuenta con un gran poder que no conocemos.
Y los errores que se puedan presentan son conocidos por OpenAI y reconocen que están trabajando. Prácticamente imposible a día de hoy que un software salga con cero fallos, pero de esta manera las críticas de los usuarios permiten ir adaptando el software perfectamente.
Pero en definitiva, aquí tenemos la historia de una persona que en pocos meses ha pasado de estar en un segundo plano a ser conocidos por muchas personas. Y todo comenzó con la destrucción de un Macintosh por pura diversión o curiosidad con el objetivo de ver como estaba funcionando.
Fuente | BBC
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